lunes, 22 de octubre de 2012

MI MUNDO.





 Cuando me desperté tras una noche llena de malos sueños y pesadillas, quedé asombrado. Mire a mi alrededor y todo era blanco, estaba metido como en un cubo enorme, intenté mirar al horizonte y mi visión se perdía en la lejanía. ¿Dónde estaba?, pues realmente no lo sé, en principio pensé que seguía inmerso en un sueño de esos que me habían atormentado en la noche, pero no, continuaba ahí, moviendo mi cabeza de un lugar a otro sin poder resolver la ecuación de donde estaba metido. Decidí tumbarme en el suelo para intentar dormirme de nuevo y salir de aquel cubo tétrico lleno de incógnitas.

 No se el tiempo que pasó desde que me dormí, pero cuando desperté seguía estando en ese maldito cuadrado sin vida, yo continuaba absorto ante lo que se mostraba ante mi. Realmente llegué a pensar que estaba muerto, pero no era así aunque lo hubiese deseado.

 ¿Dónde estaba mi familia? ¿Qué había hecho el día anterior antes de dormirme? Empecé a pensar lo que hice, pero no recordaba nada, vagas imágenes recorrían mi cerebro, pero sin llegar a algo concreto. A la mente me venína frases como crear mi propio mundo, salir del  lugar que dios había creado para mi, si recuerdo que mi vida actual no me gustaba. Tenía bastantes problemas con mi economía, y mi familia vivía lejos de mí, creo recordar que no tenía muchas ganas de vivir, pero lo que no me acuerdo es lo que hice antes de irme a dormir, posiblemente beber.

 Volví a centrarme en el lugar en el que me encontraba, mi nueva vida, mi nueva casa, pero como dije anteriormente estaba encerrado en un cuadrado de color blanco. En realidad me encontraba bien, aunque no tenía muy claro lo que el futuro me deparaba. Así que me hice fuerte y empecé a investigar los secretos de la figura geométrica. Era perfecta, y tan grande como un campo de futbol, pero a la vez tan pequeño como la habitación donde dormía. Corriendo analicé todas las esquinas del cubo sin ver nada que me hiciese pensar. Pronto me dí cuenta que a mi cerebro no llegaban ideas, simplemente un sutil velo emborronaba la forma de pensar que siempre había tenido, empecé pronto a cuestionarme que estaba sucediendo.

 El tiempo seguía pasando, y me aterraba quedarme sin oxígeno, aquello estaba cerrado herméticamente, no había salida, ni ventanas ni luces, solo, claridad. En ese momento pensé que aquellas paredes blancas proyectaban luz, posiblemente porque alrededor de este cubo habría luz ¿no?

 Llevaba más de un día allí metido, y no tenía sed, ni ganas de comer, me encontraba raro, sin fuerzas, como si mi alma no diese forma a mi cuerpo. Tenía una sensación, creo que había encontrado lo que siempre había estado buscando, el principio y el fin de todo, es decir, la verdad absoluta, la libertad. En aquel cubo era completamente libre, no tenía preocupaciones, ni que pensar en nada que angustiara mi mente, lo aleatorio resultaba tener un orden y lo esquemático se volvía solo un estándar. Tenía todo, pero solo apreciaba la unidad. ¿Existirá alguna forma de salir de aquí o realmente prefiero quedarme dentro?

 Creo que estaba enloqueciendo lentamente, necesitaba escapar, así que me senté y empecé a analizar la situación, quería entender el por qué. Así que comencé desde el principio, desde lo básico, desde lo que somos como personas.

- Durante el tiempo que llevo aquí dentro encerrado me ha hecho, aunque parezca mentira, pensar mucho, y ¿sabes una cosa? – pregunté a la soledad.
- Sorpréndeme.
-  Pues mira, no pienses que estoy loco, pero personalmente creo que yo como ser humano he sido condicionado desde que nací a pensar que el mundo donde vivimos es una realidad absolutamente material. Analiza esta frase, si quieres te la repito. Es importante que entiendas todo lo que te quiero contar.
- No te preocupes, la he entendido perfectamente, pero creo que estás perturbado.
- Para nada, estoy totalmente cuerdo. Escúchame, esto es importante. Según he ido creciendo, me he ido acondicionando a ese mundo, construyendo mi vida entera, basándome en este punto de vista.
- ¿Adónde quieres llegar con esto?, ¿por qué no te planteas la forma de salir de aquí, y dejas de pensar tonterías?
- ¿Tonterías dices?, solo tienes que ver como en estas últimas décadas los diferentes descubrimientos de la ciencia moderna, revelan la enorme diferencia entre realidad significativa y lo que es presumido. Tienes que entender que toda la información que hemos recibido de nuestro mundo exterior, nos es transmitida por nuestros cinco sentidos, es lo único que tenemos para saber donde estamos.
- Me preocupa lo que me estás diciendo, en serio. Claro que tenemos cinco sentidos. Si no fuera por ellos no tendríamos información de ningún tipo, seríamos como una piedra.
- Veo que empiezas a entenderlo. El mundo que conocemos consiste en lo que nuestros ojos ven, nuestros oídos oyen, nuestras narices huelen, nuestras lenguas saborean y nuestras manos sienten. Dependemos desde que nacemos de estos cinco sentidos, por ello conocemos el mundo exterior solamente de la manera en la que nuestros sentidos nos lo presentan. Lo que estoy diciendo es lógico, tienes que entenderme. No me trates como a un loco por favor.
- No es mi intención hacerte sentir así, pero entiéndeme que en esta situación lo último que me apetece es ponerme a pensar en lo que estás diciendo. Recuerda que llevamos sin comer y sin beber más de un día, y esto si es un problema. Como bien dices, nuestros sentidos necesitan ser alimentados para que sigan funcionando y así de esta forma evitar caer en el páramo del olvido.
- ¡Calla un momento!, seguro que te acuerdas de aquel día donde te conté lo que descubrí sobre nuestros sentidos y que revelaban hechos diferentes de aquello que llamamos mundo exterior.
- Ahora mismo nuestro mundo exterior es un cubo con todas sus caras de color blanco.
- Escúchame por favor, solo quiero contarte esto. Lo que descubrí fue el secreto sobre la materia de la cual está hecho el “mundo exterior”…ya entiendo todo…
- Jajajaja, ya está bien…para…
- Manifesté que el hombre es una imagen, que todo lo experimentado es temporal e ilusorio, y que este universo es una sombra.
- ¿Pero cómo puedes probar todo esto que me estás contando?, solo con decirlo no llegamos a ninguna conclusión, necesito saber por qué piensas eso.
- Es sencillo si lo entiendes. Lo primero que tenemos que pensar, es como captamos la información de la realidad que nos provee con la más extensa información de nuestro mundo exterior. Esto nos lleva a la siguiente pregunta. ¿Cómo vemos?
- ¿Cómo vemos?, que teoría tienes.
-  La visión activa ocurre progresivamente en el momento de la visión.
- Espera, espera, que es eso de ¿visión activa?
- Perdona, te explico. Un día descubrí que la gente está muy confundida a la hora de percibir lo que ve por los ojos, es decir, se piensan que con barrer nuestro entorno vital e ir recopilando información pueden proyectar un supuesto mapa mental de su entorno, provocando la ilusión de que “lo vemos todo con detalle”. Claramente no es así, cuando me refiero a la visión activa, quiero decir que ese mapa mental es muy pobre y limitado y que la visión es un proceso dinámico.
- Ahora lo entiendo, parece interesante, pero no completo.
- Mira, en el momento de la visión, partículas luminosas llamadas fotones, viajan desde el objeto que vemos hasta el ojo pasando por el cristalino donde son refractados y enfocados hacia la retina, en el fondo del ojo. Aquí, los rayos luminosos son transformados en señales eléctricas y transmitidas por el sistema nervioso hasta el centro de la visión en la parte posterior del cerebro. Con esto quiero decir, que el acto de mirar ocurre en realidad en lo más profundo del cerebro.
- ¿Y?
- Pues que todas las imágenes que vemos en la vida y todos los sucesos que experimentamos, son en realidad un pequeño y oscuro lugar del cerebro de apenas centímetros, que se encuentra al final de nuestra cabeza.
- ¿Qué es lo que me quieres decir?
- Cuando dices que ves, lo que en realidad vemos, son el efecto de los rayos alcanzando los ojos y nuestro cerebro en forma de señales eléctricas. Observamos esas señales eléctricas en nuestro cerebro ¿lo entiendes? Ahora piensa que nuestro cerebro está aislado de la luz y se encuentra en completa oscuridad, por lo que no es posible para él constatar esa luz por sí mismo.
- No lo entiendo.
- Te pongo un ejemplo, supongamos que aquí delante tienes una vela encendida y que vemos su luz, pero mientras vemos esa luz, el interior de nuestro cerebro está en completa oscuridad. La luz de la vela nunca ilumina nuestro cerebro, sin embargo vemos un mundo luminoso y colorido, dentro de nuestro cerebro sin luz.
- Interesante, nunca lo había pensado. Pero ¿por qué me cuentas esto?
- Pues esto que te acabo de contar aplícalo al resto de nuestro sentidos, oído, tacto, gusto y olfato, que son percibidos igualmente por nuestro cerebro en forma de señales eléctricas. No te das cuenta con lo que te he dicho que a lo largo de la vida, nuestro cerebro nunca se relaciona con la fuente original de la materia existente fuera de nosotros, sino con una copia eléctrica de la misma, formada dentro de nuestro cerebro.
- ¿Quieres decir que esas copias son instancias de la realidad?
- ¡Exacto!, ¿ves como es fácil entenderlo?, esto nos hace llegar a una conclusión indiscutible, todo aquello que vemos, oímos, tocamos y sentimos como materia son simples señales eléctricas en nuestro cerebro, incluso el universo mismo.
 Imagínate que ves un pájaro en nuestro mundo, en realidad no está en nuestro mundo, si no en nuestro cerebro- El pájaro que ves es en realidad el resultado de las señales eléctricas en nuestro cerebro. Si se rompiera este complejo proceso, el pájaro desaparecería súbitamente, igualmente ocurre con los sonidos del pájaro, también son formados por nuestro cerebro, si desconectamos el nervio que conduce el sonido, no habría sonido. Ahora imagina que este pájaro se convierte en el cubo donde estamos metidos.
- Todo lo que vemos….es una copia de la realidad….nunca lo había pensado, pero es cierto joder.
- Y no solo eso, déjame que te cuente en que consiste la sensación de distancia que por ejemplo podemos experimentar dentro de este cubo. Esto lo he pensado durante las más de 24 horas que llevamos aquí, tú deberías haber hecho lo mismo.
- ¿Sensación de distancia? ¿Dentro del cubo?
- Si, por ejemplo piensa en la distancia que tienes entre cualquiera de las paredes de este cubo y tu. Si lo analizas, esta distancia es tan solo una sensación de espacio formada en tu cerebro. ¿Me explico?, no me mires así y piénsalo coño. Y aunque mires al infinito, a la estrella mas lejana del universo, en realidad creas una imagen que plasmas en un punto dentro de tu cerebro. Tú asumes que están a millones de años luz de distancia, cuando en realidad las tienes dentro de ti.
- Si, es una forma de verlo. Pero nadie lo entendería si no lo piensa detalladamente.
- Nadie lo quiere entender, porque parece una locura. Tu piensas que estás dentro de este cubo con sus paredes blancas y perfectas, pero en realidad es el cubo el que está dentro de ti.
- ¡Dios!, es una locura solo suponerlo, pero a la vez me parece una evidencia. Entonces cuando miramos nuestro mismo cuerpo….
- El que veas tu cuerpo te hará pensar que estás dentro de él, pero debes recordar que tu cuerpo también es una imagen creada por tu cerebro.
- Resumiendo, más o menos he entendido con lo que explicas, que existe un mundo externo, un mundo de percepciones formadas en nuestro cerebro por lo que vemos, sin embargo, nunca somos capaces de alcanzar el mundo externo. Entonces….
- Entonces ¿cómo podemos estar seguros de que ese mundo externo realmente existe?, la respuesta es automática, no podemos. La única realidad con la que nos relacionamos, es el mundo de percepciones que proyectamos en nuestra mente.
- Entonces quieres decir, que imaginar la materia que existe fuera de nuestra mente es un engaño o ilusión. Y que las sensaciones que observamos pueden estar viniendo de forma artificial.
- ¡Correcto!, te pongo un ejemplo. Primero supongamos que podemos extraer el cerebro de nuestro cuerpo y mantenerlo vivo en un cubo de vidrio. Ha esto le añadimos un ordenador que tiene guardadas en un cd diferentes imágenes, olores, sonidos…que previamente hemos sentido. Con todo esto preparado, conectamos el ordenador a los centros de los sentidos en nuestro cerebro con electrodos y a enviar a nuestro cerebro los datos previamente guardados en ese CD. Cuando nuestro cerebro perciba estas señales verá y revivirá las escenas de nuevo. Supongamos que desde el ordenador  también podemos enviar al cerebro señales eléctricas relacionadas con la imagen. Por ejemplo podemos enviar señales sobre qué es lo que percibimos o sentimos cuando estamos sentados delante de nuestra mesa de trabajo. En este punto, el cerebro pensará que es un hombre de negocios sentado en su despacho. Este mundo imaginario continuará siempre y cuando la estimulación siga llegando desde el ordenador. Nunca nos daríamos cuenta de que solo existiríamos en nuestro cerebro. De hecho es muy sencillo que seamos engañados al creer que percepciones sin una causa material son reales. Algo parecido ocurre cuando soñamos.
- Estás yendo demasiado lejos, me estás asustando de verdad. Quiero salir de este cubo, no aguanto más la presión. Tengo hambre, tengo sed, y estoy desesperado. Además creo que estás como una regadera. Ya no llego a entenderte. ¿Estás?
- Utiliza las claves, los arquetipos, y verás como hay una existencia ilusoria y otra existencia real.
- ¡¡¡¡Quiero despertar de este sueño!!!!!!!
- ¿Sueños?, para ti, la realidad es todo aquello que puede ser tocado con las manos y visto con los ojos. Pero realmente en los sueños también puedes tocar con tus manos y ver con tus ojos, obviamente no tienes manos, ni ojos y tampoco existe nada que pueda ser tocado o visto. Cuando comparas lo que percibes en un sueño con la realidad estás siendo engañado.
- ……
- ¿No lo entiendes?, voy a intentar ponerte un ejemplo. Cuando tu te has despertado aquí dentro, estabas durmiendo, podrías verte en tu sueño a ti mismo como un piloto de aviones, incluso te esforzabas en pilotarlo mientras te movías de un lado a otro en este frío suelo. Lo que te quiero decir es que puedes vivir en distintos escenarios y encontrarte con amigos, hablar, comer y beber con ellos. Y solamente cuando te despiertas de ese sueño, te darás cuenta que solo eran percepciones.
- ¿Me quieres decir que todo esto es un sueño?, quiero despertar, quiero dejar de tener estas percepciones. Seguro que es un sueño, esta claro.
- Esto es real, no es un sueño, lo que quiero que entiendas es que puedes vivir en un mundo irreal a través de ellos. ¿Quién no te dice que llevas  toda tu vida soñando, y cuando te despiertes?…..no sé…..piénsalo.
- Lo pienso, claro que lo pienso, entonces explícame, si todo son percepciones ¿qué hay en el cerebro?
- El cerebro es materia, si nuestro cerebro lo pudiéramos ver y tocar con nuestros dedos entenderíamos que no es más que una percepción formada por los sentidos de la vista y el tacto.
- Entonces…..¿quién es el que ve, oye, toca y percibe el sabor y el aroma? ¿quién es ese ser que piensa, razona y tiene sensaciones?
- Jajajajajajja, el hombre pequeño que está dentro del hombre pequeño, el fantasma de la máquina. Tu buscas el “yo”, la persona que usa el cerebro. El ser metafísico que usa tu cerebro, ve y siente, es el alma. Lo que llamamos mundo material, es el conjunto de percepciones  vistas y sentidas por ese alma. Entiende esto, así como los cuerpos que poseemos y el mundo material que vemos en nuestros sueños no poseen una realidad física, el universo que ocupamos y los cuerpos que poseemos tampoco tienen una realidad material.
- Entonces ¿dónde estamos?, ¿qué significa este cubo?, ¿es real?, ¿es una percepción de un sueño?. Estoy hecho un lío. Tengo hambre.
- Querido amigo, este cubo es real, de hecho le construí hace 3 años, como el proyecto de fin de carrera que cursé, pero claramente nunca lo presenté, al igual que tu, pensarían que no estoy cuerdo. Por lo tanto, todo lo que te he contado me ha hecho recordar que fui yo mismo el que me metí dentro del cubo, y que mediante un programa con un temporizador lo cerré herméticamente, para siempre.

- Realmente estás dentro de un experimento, todo lo que ves es una copia de la realidad. Olvídate de comer y de beber, y piensa que si hubieras nacido dentro de este cubo, no conocerías nada, posiblemente serías ciego con el tiempo, y sentirías con tu alma. Llegarías a ser inmortal, porque la muerte liberaría todo tu conocimiento. Antes vivíamos en un mundo artificial, inexacto, en el que es imposible apreciar lo que tenemos. Pasemos al mundo real para disfrutar de la nueva vida.

 James, doctorado en física teórica, fue encontrado muerto dentro de una figura geométrica de color blanco, cuyas dimensiones eran perfectas. El cubo, contaba con un sistema informático que permitía cerrarlo herméticamente por uno de sus lados. Todo indica que fue él mismo el que se introdujo dentro del cubo y que el temporizador del programa que James diseñó, cerró su vida para siempre.

 Después de varios días se ha conseguido extraer el cuerpo sin vida del prestigioso inventor. Según los forenses, el fallecimiento se produjo por falta de oxígeno y desnutrición. No constan señales de violencia ni de suicidio.

A.E.C.